La madera es un producto abundan los usos que se le da a este producto, como sabemos los carpinteros de Gandiporta. La madera hace parte de todas las sociedades del planeta, debido a su versatilidad.

Son muchos los muebles y artículos que se pueden elaborar a través de este material. Por eso, la variedad de productos derivados de la madera es muy amplia.

¿Qué son los derivados de la madera?

Se habla de derivados de la madera, de todos aquellos productos que se pueden extraer de su estado en bruto. Cuando se derriba un árbol de pino, se habla explícitamente de madera de pino. Pero aún no se ha transformado este producto en algo más a lo que se le pueda dar un uso.

El concepto de derivado de la madera es el mismo que refleja un producto como lo es la leche. De la leche se pueden crear diversos productos, tal como lo son los yogures, el queso, la mantequilla, entre otros. Por esa misma línea de producción trabaja la madera una vez es talada y transportada aserrío, dentro del proceso de obtención.

Los aserríos, que son los lugares de producción y cortes de madera, transforman a un largo árbol de pino en una viga, cerchas o machimbre para una casa, a modo de ejemplo. En estas empresas, se respeta tanto el material en bruto que representa la madera, que incluso las virutas y el aserrín pueden servir para crear derivados.

¿Cuáles son los derivados de la madera y sus usos?

Estos son algunos de los derivados más comunes que se generan a través de la madera:

Tableros aglomerados

Actualmente, existe una fuerte industria basada en la producción de tableros aglomerados. Prácticamente se puede decir que es un producto donde se recicla los residuos de la madera. Todas las virutas y aserrín que sobran durante los procesos de corte, se compactan para crear tablones.

De esa manera surge un producto muy compacto y de muy buena resistencia. Aunque no es tan sólido para crear construcciones. Se utilizan mucho los aglomerados para crear escritorios y mesas. El resultado son productos livianos, que generalmente se venden como muebles armables.

Tableros contrachapados

En este caso, se habla de crear una lámina realmente gruesa, pero que en realidad está conformada por láminas muy finas. Si te fijas en un tablero contrachapado te darás cuenta que parece como alterna el color pálido y oscuro entre lámina y lámina.

Eso se debe a que el pegado se concreta así para evitar que la madera se curve. Este es un tipo de madera que es fácil de trabajar. Es bastante útil para crear sillas, techos y cajas de transporte.

Tableros de fibras

Representan una versión un tanto similar a los tableros aglomerados. La diferencia recae en que las virutas y el serrín son molidos, para luego mezclase con resinas. También se suele usar cola. Al final, toda esa mezcla se prensa, creando un tablón bastante liso. Es un tablero de densidad media.

A la hora de darle utilidad, suele servir para crear divisiones en las oficinas y ciertos muebles. Incluso sirven para la fabricación de cocinas, puertas y alacenas.

Listones

Los listones son los productos que mayor utilidad tienen en el mundo de la construcción. Los listones se extraen dividendo la totalidad del árbol en distintas secciones. La sección serrada suele tener un grosor similar a un cuadrado, pero de un largo de estilo rectangular.

Las grandes vigas de madera que sirven para crear los techos de casas de estilo rústico, representan a este tipo de derivado. Generalmente estas vigas se extraen de maderas resistentes como lo es la madera de pino. Como también de arboles de una gran altura.

Cartón

Este es uno de los derivados más comerciales de la madera. Para poder crear el cartón, se procede a la trituración de la madera, a la vez que se le da una cocción. En esta cocción participan ciertos aditivos, que permiten crear lonjas de madera de un grosor más débil, pero resistente.

El uso del cartón naturalmente ha servido durante las últimas décadas para crear cajas de transporte.

Papel

Y naturalmente no podía faltar en este conteo, el derivado que representa el papel. Un derivado que ha sido fuertemente criticado durante las últimas décadas. Esto se debe a la enorme demanda que tiene el papel, como también por el excesivo uso de agua durante su proceso de elaboración.

El papel suele crearse, retirando la capa que protege al tronco. Es decir, se retira la corteza y a través de unos rodillos se va aplanando esta superficie. Aunque también existen otros procesos más ecológicos, donde se aprovecha los residuos del aserrín y las virutas.